Una Actividad.
En este trabajo voy
hablar de una actividad en la que he participado y que considero que ha sido un
desafío muy interesante para poder conocer un poco más de mis límites.
En el pasado verano de 2014, decidí participar
en un “Trail” en mi patria. Un “Trail” es una corrida por el campo y por
caminos muy apretados de tierra conocidos como los caminos de cabras, dónde al
largo del trayecto fui encontrando obstáculos como subidas acentuadas, piedras
grandes en el camino donde por veces teníamos de saltar-las entre otras
situaciones. En esto “Trail” en que
participé, era considerado como un
“Trail” de nivel “bajo o medio”, esto porque tenía una distancia de tan solo 15
kilómetros. Digo sólo porque normalmente este tipo de actividades tiene trayectos de mucho más kilómetros. Para mí esto ha sido
un desafío bastante interesante, porque
yo nunca había participado en ningún evento con estas características y para lo
cual yo no tenía ninguna preparación. Sólo dos días antes, resolví hacer unas
corridas de preparación pero de pequeña distancia. El dolor en mis piernas eran
muchas, como normalmente decimos tenía las piernas herrumbradas. En el día del
“Trail” me he despertado por las siete de la mañana y el inicio de la actividad
era una hora y media después, por las 8h30. Después de la partida sentía en los
primeros minutos un nerviosismo, algo que al largo del tiempo fue pasando, así
termine la prueba en una hora y cincuenta minutos. Al final me he quedado
bastante satisfecha con el resultado y por la experiencia, una vez que nunca había
participado en algo de este género.
Con esta actividad
aprendí que cuando queremos, nosotros conseguimos, basta tener fuerza de
voluntad.