martes, 9 de abril de 2013

Barcelona


Una aventura en Barcelona

                En un bello día de sol, en las vacaciones escolares, cuatro amigos, Belén, Carolina, Rita y João, deciden hacer un viaje de tres días, una vez que aún no tenían planes para el resto de las va

caciones.
Belén escogía países que quedaban muy lejos y con un coste final muy caro, lo que hizo con que los demás pusieran esa idea de parte. Sin embargo, despúes de mucha discusión Carolina sugirió Barcelona y los demás se callaron por momentos y empezaron a pensar decidiendo al final que sería la mejor idea.
 Empezaron entonces a buscar hostales para que pudieran quedarse todos juntos y ahorrar dinero para otras actividades. El hostal escogido fue el Central Station una vez que era el que tenia mejores condiciones y un precio razonable y quedaba apenas a 200 metros de “Las Ramblas”.
Iniciaron esta aventura el día 23 de septiembre, cerca de la hora del almuerzo. Los cuatro amigos fueron al hostal dejar las maletas y comer unas tapas de jamón que había en el bar y se fueran a la descubierta. El primer día seria para conocer tres museos muy famosos. En primer lugar se dirigieron a la “Fundación Juan Miró “, donde se encuentran obras de este autor procedentes de todo el mundo, en segundo lugar al “Museo Picasso”, que es muy conocido en todo el mundo y vieron los primeros cuadros pintados por Picasso y por fin para acabar bien el día fueron al “Museo de arte contemporánea” que fue construido recientemente para exponer arte actual.
Llegó el día 24 y con este también un gran costumbre español, “Los Castells”.  Los cuatro amigos estaban deseando ver esta espectacular torre humana de 8 pisos. Este acontecimiento era tan importante para estos amigos que escogieron el día del viaje de forma a poder ver este espectáculo. La torre era formada por mujeres, hombres y niños y la corona del castillo fue un niño pequeño que la hizo levantando un brazo.
El viaje de estos amigos estaba llegando a su fin y para terminarlo en grande reservaron el último día para visitar todas las obras de Antoni Gaudí. Sus parques modernos e encantadores y el Templo de la Sagrada Familia, que es la iglesia menos convencional de Europa. Joao e Rita se sentaron a contemplar esta fabulosa obra, discutiendo cómo este trabajo les recordaba la naturaleza y pensando cómo fue posible que Gaudi viviera 16 años dentro de esta obra sin poder acabarla.
El viaje llegó a su fin pero estos cuatro amigos se fueron para casa conociendo una nueva cultura y habiendo conocido una de las ciudades Españolas más bonitas, sabiendo equilibrar muy bien el toque clásico con el moderno. Un viaje que les quedara en la memoria para siempre.



2 comentarios:

  1. Lo que uno tenía de menos, este tiene de más... me gustaría, eso sí saber cuál es el tuyo, porque es imposible que sean los dos...

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